Es que no da risa
pero igualmente las carcajadas desenredan el ambiente enredado de humo, alcohol y café, más café que humo y más humo que alcohol. ¿Más alcohol que café? a la ultura de ese enrriedo nocturno, ¿quién sabe qué?
Te sigue pareciendo añorativo juntarte con ciertas personas, casi irrisorio, como una inercia  recreativa que viene de no se que lugar incógnito, alguno oscuro con florecitas amarillas, y para nada te causa gracias, en realidad para nada te causa nada. Bastante catarsis, bastante baba desperdiciada en toser y hablar sobre lo que les interesa, que en realidad no sabes si les interesa, pero ponen cara de comprender y sonríen, hasta llega a ser placentero por momentos, aunque te sentis medio careta (por así desirlo)
El rincón húmedo y tibio te gusta, pero las interacciones tienen ese algo de interesantes, inentendible, inteligible, instintivo, que te hace seguir estando con otros, relacionándote, ¿o enredándote? de última se parecen, y de vez en cuando preferís enredarte con cierta gente, literal y metafóricamente, y eso que la solidaridad siempre te pareció un recurso demagogo para sacar provecho, el altruismo una mentira que preferís creer y el socialismo una esperanza pintoresca difícil de sostener, sin embargo el gusto a gregarismo te sabe cada vez más a costumbre, y el enredo con gente linda, una escusa tonta para agregar masa a la torta.
Lejos de hacerte pesimista. Gente linda si la hay, pero mi perro me cae mejor. Pero que va, enredarte una vez más con muchos a la vez no está tan mal, es más, esta bien ,estas super bien.